Confirmada Mercado Libre, cuáles son las empresas que llevaron a Franco Colapinto a la Fórmula 1

Era la noche del viernes 23 de agosto cuando comenzó el desenlace de un sueño de 18 años de duración, que se gestaba en lo más profundo del ser de Franco Colapinto. Desde la escudería de Fórmula 1, Williams Racing, estaban analizando reemplazar a uno de sus pilotos titulares: Logan Sargeant. El estadounidense tuvo un pálido 2023, donde sumó un escaso punto en las 22 carreras que disputó.

Solo por detrás de Sargeant quedó Nick De Vries, el neerlandés que apenas inició 10 carreras con la escudería Alpha Tauri y no sumó ningún punto. Sin embargo, el 2024 venía siendo aún peor para el norteamericano, que destruyó el auto en más de un accidente y estaba siendo un dolor de cabeza para la tesorería de Williams.

Con las 2 primeras prácticas libres del Gran Premio de los Países Bajos disputadas, los jerarcas del equipo inglés ya habían contactado a la representación de Franco Colapinto. No obstante, el acabose para Sargeant fue la práctica libre número 3, donde en una pista húmeda mordió el césped del Circuito de Zandvoort y perdió el control del monoplaza, que terminó estrellado contra el muro y con llamas en su parte trasera.

Una vez que se conoció que Colapinto lo relevará en las 9 carreras que restan en el actual campeonato, se presumió que fue por el enésimo accidente de Sargeant el sábado anterior. A pesar de que fue un punto de inflexión, la mánager de Colapinto, María Catarineu, confesó en Radio Carburando que los contactos se habían iniciado horas antes.

En la tarde del martes Williams confirmó que bajaba del FW46 a Logan Sargeant para darle la butaca a Franco Colapinto. A los 21 años el argentino cumplió un sueño que comenzó cuando todavía no tenía uso de razón, a los 3 años.

A esa edad Franco tuvo su primer contacto con un vehículo motorizado. Los padres del oriundo de Pilar decidieron regalarle un triciclo con motor eléctrico para su cumpleaños. Cuando el pequeño se subió a su nuevo juguete le dio, sin saberlo, el puntapié inicial a un sueño que se haría realidad 18 años después.

Su madre, Andrea Trofimczuk, contó en Infobae aquella epifanía a la que asistieron junto a Aníbal, padre de Franco. “Tenía tres años y fue la primera vez que lo subimos a un triciclo que decidimos con Aníbal regalárselo para su cumple. Tenía motor eléctrico. Lo llevamos a una juguetería y nunca se había subido a nada que tuviese motor o algún tipo de propulsión más allá de sus pies», comentó en primera instancia.

«El empleado de la juguetería lo sentó y esperó para poder llevarlo y acompañarlo para pasear un poco por la juguetería y que lo pudiera probar. Y de golpe Franco lo aceleró, empezó a esquivar entre las góndolas y no lo podía parar nadie. Estaba como loco, como si siempre se hubiese subido a algo así. Era su primer contacto con algo a motor. Desde chico tuvo esa habilidad increíble para conducir”, expresó la madre del piloto que debutará en una carrera de la máxima categoría el próximo domingo en Monza, Italia.

Las horas previas al anuncio

Luego del golpe de Sargeant, por el que Williams tuvo que invertir alrededor de 1 millón 700 mil dólares para reparar el auto, el diálogo con la representación de Colapinto se intensificó. El norteamericano colmó la paciencia de la escudería inglesa y decidieron desplazarlo, pero su sucesor no estaba definido.

Colapinto viajó a la sede de Williams en Grove, Oxfordshire, para tomar posición en el simulador de Fórmula 1, donde ya venía teniendo un nivel superlativo a lo largo del año. El argentino estaba preparando la decimoprimera fecha de la Fórmula 2, que también se correrá en Monza pero, ante la chance de la F1, Colapinto cambió el chip y se puso a la expectativa de una oportunidad en el gran circo.

Logan Sargeant no pudo disputar la clasificación por las condiciones en las que había dejado a su auto. Para el día domingo el vehículo ya había sido reparado y en la carrera finalizó 16 de 20, sin cosechar unidades (se suma del décimo puesto en adelante), pero sus horas ya estaban contadas desde antes. En el podio del día estuvieron Lando Norris, Max Verstappen y Charles Leclerc.

Williams mantiene una relación fluida con Mercedes, ya que la escudería alemana le provee los motores que utiliza el FW46. Por este motivo se analizaban 2 pilotos del equipo que dirige Toto Wolff como opciones para reemplazar a Sargeant: Andrea Kimi Antonelli y Mick Shumacher.

El italiano era rival de Colapinto en la F2 y es un gran talento de apenas 18 años. Antonelli es parte de la academia Mercedes y será el reemplazante de Lewis Hamilton en 2025, ya que el siete veces campeón se marchará a Ferrari.

Sin embargo, Wolff descartó esa posibilidad debido a que estaba designado para ser parte de la práctica libre 1 en Monza. Al boloñés lo están fogueando para el salto a la Fórmula 1 el próximo año, aunque su desempeño no fue positivo.

Tras solo 10 minutos de conducción, Antonelli estrelló contra el muro el monoplaza que le pertenece a George Russell. De igual manera, un obstinado Wolff lo confirmó horas después para tomar un asiento titular en la temporada venidera.

Por el lado de Shumacher, piloto de reserva de Mercedes, se encontraba el rival más fuerte de Colapinto ya que, al ser hijo de un séptuple campeón, el alemán posee un apellido pesado en el automovilismo. Además, Mick cuenta con una experiencia de 2 años en F1. Aunque, en su momento, el equipo Haas lo dejó de lado por el mismo motivo que ahora Williams bajó a Sargeant, ser inconsistente y costarle mucho dinero al equipo.

Otros contendientes a tomar el asiento que el estadounidense dejaba vacante fueron descartados con mayor rapidez, como Liam Lawson, piloto de reserva de Red Bull. Tampoco entró seriamente en la contienda Oliver Bearman, conductor oficial de Haas a partir de 2025. Los brasileños Felipe Drugovich y Gabriel Bortoletto también fueron mencionados, pero ambos pertenecen a otras academias (Aston Martin y McLaren, respectivamente).

Colapinto corría con la ventaja de pertenecer a la academia Williams y ya haber hecho una práctica libre a principios de julio en Silverstone. Además, su rendimiento en el simulador viene siendo muy bueno, más allá de su destacable desempeño en Fórmula 2 con el equipo MP Motorsport.

Franco Colapinto o Mick Schumacher, la disyuntiva de James Vowles

Un hombre que fue un factor clave en el desembarco de un piloto argentino a la Fórmula 1 después de 23 años fue James Vowles. El director de equipo de Williams llegó este año a Grove para darle su impronta a uno de los equipos legendarios de la máxima. El ingeniero de 45 años trabaja con mucha seriedad y profesionalismo, y confía mucho en el talento de Colapinto.

Vowles estaba inclinado a favor del argentino, pero había un factor a resolver: el económico. Una característica de la Fórmula 1 en los últimos años es que, para obtener una butaca en una escudería, prácticamente hay que ser millonario. El ejemplo más acabado de esta condición es el de Lance Stroll, piloto que conduce un Aston Martin porque Lawrence, su padre, es un magnate canadiense que adquirió el equipo en 2018.

El fin de semana pasado presentó las horas más movidas para la empresa Bullet Sports Management, encargada de velar por los intereses de Franco Colapinto. Jamie Campbell-Walter y María Catarineu se ocuparon de negociar con Williams y conseguir el financiamiento a través de patrocinadores que ya estaban acompañando a Franco en F2.

Para darse una idea del dinero que hace falta para subirse a un Fórmula 1, el periodista de motor, Máximo Sant, hizo un relevamiento. «Si tienes mucho dinero, pero no tienes talento, olvídate, nunca vas a llegar a ser profesional de la Fórmula 1. Pero si tienes mucho talento y poco dinero, te digo lo mismo», sentenció el español en su canal de YouTube, Garaje Hermético.

Solo para ingresar como piloto al gran circo hacen falta alrededor de 10 millones de euros. No obstante, previo a ese salto existe la inversión en otras categorías, como Fórmula 2, por ejemplo. Sant calcula que hay que desembolsar alrededor de 3 millones 600 mil euros para acceder a la antesala de la F1.

Antes existe un paso por el karting, que también cuesta centenares de miles de euros, por lo que el proyecto de llevar un automovilista a la máxima categoría rozaría los 20 millones de euros. Un detalle importante a tener en cuenta es que el presupuesto de Colapinto, en esta ocasión, es solo pensando en 9 carreras, a diferencia de las 24 citas que tiene la actual temporada.

¿Qué empresas ayudaron a Colapinto a llegar a la Fórmula 1?

Lejos del fenómeno mediático que es hoy en día Franco Colapinto, hace solo un par de años el pilarense debía rasguñar sponsors para solventar su campaña en Fórmula 3. En aquel momento terminó siendo clave el apoyo del Ministerio de Deportes y Turismo de Argentina. Desde YPF y Marca País se ayudó al joven piloto a desenvolverse en la categoría formativa. Otro impulso importante fue unirse a la academia Williams.

De igual manera, para dar el salto a la Fórmula 2 no alcanzaba con ese patrocinio, ni sumando otras marcas europeas que estaban en Bullet. Por ese entonces, Colapinto era un fenómeno de los medios en ciernes. Franco no gozaba, ni de cerca, de la popularidad actual. Sin embargo, en el mundo de las redes sociales del automovilismo, un nicho muy reducido, su fanaticada estaba haciendo ruido.

Luego de terminar cuarto en la temporada 2023 de la F3, Colapinto estaba obligado a conseguir una butaca en F2 para mantenerse en la órbita de Williams. Sin embargo, el financiamiento debía multiplicarse y el panorama no era alentador. Fue allí cuando se viralizó una nota del argentino donde se lo veía apesadumbrado, sin la chispa que lo caracteriza, con la desilusión de alguien que ve cómo se escurre su sueño.

La situación era comprometida porque no parecía que se pudiera alcanzar el presupuesto necesario. Fue allí cuando se vio el lado positivo de la vilipendiada red social X (ex Twitter). Un hashtag se hizo tendencia mundial y despertó el interés de empresas y medios: #FranColapintoaF2. Uno de los primeros en recoger el guante fue el artista argentino Bizarrap.

El músico se contactó con Colapinto y ofreció su apoyo. A pesar de que no podía financiar la totalidad de lo que necesitaba el conductor, movió sus influencias y le acercó gente importante. El primero de ellos fue Martín Migoya, CEO y cofundador de Globant, la empresa unicornio argentina que se especializa en software y tiene alcance internacional.

A partir de ese momento el sueño de Colapinto dejó de pender de un hilo y la F2 ya aparecía en su horizonte. Aquella desilusión del argentino se transformó en pura esperanza que surgió desde la pasión de sus compatriotas. Tiempo después se confirmó su arribo a la Fórmula 2, de la mano de MP Motorsport, y su permanencia en la academia Williams.

Pero allí no acabaría todo, ya que más empresas captaron el impacto que tenía el hecho de que un argentino estuviera cerca de llegar a la Fórmula 1 y sellar un hecho inédito en 23 años. De a poco, se fueron sumando las siguientes marcas: la Cervecería Quilmes, la aerolínea de bajo costo Flybondi, la papelera Celulosa Argentina, la empresa de asistencia al viajero Pax Assistance, la financiera Green Management Capital, la plataforma de criptomonedas Ripio y la firma especializada en seguridad Greenarmor.

Un párrafo aparte merecen 2 empresas por distintas razones y características particulares: Mercado Libre y Bigbox. La marca que se encarga de «regalar experiencias» auspicia a Colapinto pero su fundador, Gastón Parisier, ocupó un rol fundamental alrededor de Franco.

El emprendedor solía «cubrir» las carreras de Colapinto en F2 y la práctica libre en Fórmula 1. A su vez, en el pasado fin de semana se movió a la par de los representantes del automovilista para conseguir el financiamiento para saltar al gran circo. La propia María Catarineu lo destacó como una pieza clave en la concreción del objetivo más deseado.

A pesar de que el apoyo ya era fuerte, hubo otros factores claves en el desenlace de la historia. Uno de ellos se dio 3 meses antes y fue la llegada de Globant como sponsor de la Fórmula 1. Ahora, ya con la firma estampada de Colapinto, la tecnológica también llegó a un acuerdo con Williams, por lo que patrocina a la escudería entera y no solo al argentino.

No obstante, había un último sponsor que estaba encerrado bajo una incógnita. ¿Por qué? En las últimas semanas se corría el rumor de un acercamiento del equipo de Franco Colapinto con la firma más valiosa de toda Latinoamérica: Mercado Libre. Sin embargo, recién en la tarde del viernes 30 fue cuando se anunció a la empresa de comercio electrónico como sponsor de Williams.

El periodista Leonardo Regueira reveló que se estaba esperando el apoyo de la empresa de Marcos Galperín. Según el comunicador, Mercado Libre ya estaba aportando de manera secreta, pero ahora terminó de meterse de lleno en el auspicio del joven de 21 años. Definitivamente, existía un embargo para los que sabían de la llegada de Mercado Libre, empresa que anunció su patrocinio luego de las 2 primeras prácticas libres correspondientes a la decimosexta fecha del campeonato de Fórmula 1.

¿Qué esperar de Colapinto en Fórmula 1?

Lo primero y más importante para Franco Colapinto será cuidar el auto de Williams que Logan Sargeant tanto maltrató. Cabe destacar que, de 10 escuderías que hay en la F1, la inglesa se ubica novena en este 2024. Los 4 puntos que aportó Alex Albon en las 15 carreras que se llevaron a cabo hasta el momento se presentan muy lejanos de las 434 unidades del puntero: Red Bull.

Si el novato y el anglotailandés ahora pueden sumar algo más y ganar otro puesto en el campeonato de constructores será muy bienvenido, pero las expectativas tienen que ser realistas. En Williams solo tendrá 9 carreras y en 2025 ingresará en su lugar el prestigioso Carlos Sainz Jr., quien fue desplazado de Ferrari por la llegada de Lewis Hamilton.

Mientras mejor sea el rendimiento de Colapinto, mejores sensaciones dejará y tendrá más chances en el futuro. Por lo pronto, para 2025, solo quedan libres 2 asientos: Kick Stake Sauber y RB Visa Cash App (lo más probable es que el seleccionado sea Liam Lawson).

De esta manera, en 2026 puede haber novedades ya que hay un cambio de reglamento importante y se incorporará una nueva escudería en lugar de Sauber: Audi. Más allá de lo que suceda en el futuro, en la actualidad el niño de 3 años que corrió por primera vez sobre un triciclo eléctrico concluirá un camino de 18 años, pero que le dará inicio a otro.

Aquella juguetería que fue improvisada como pista de carreras ahora se convirtió en el Autódromo Nacional de Monza, «el templo de la velocidad», uno de los circuitos con mayor historia en el mundo. Aquel triciclo es sustituido por una máquina de máxima tecnología, con un motor de un millar de caballos de fuerza que impulsan la estructura a unos 350 kilómetros por hora.