Los bosques son fundamentales para el equilibrio eco social del ambiente que habitamos. Históricamente diversas culturas le han adjudicado su valor ecológico, social y cultural, desde su idiosincrasia y para la preservación. A partir del Siglo pasado a la actualidad, se ha presenciado un grave deterioro y perdida de bosques nativos, lo afirman estadísticas internacionales e nacionales que se visualizan en el territorio.
Las causas que llevan al deterioro son variadas y se caracterizan según el país y la ecorregión. Lo cierto es que desde el comienzo de la Revolución Industrial, las personas habitamos mas los espacios urbanos, delegando el cuidado de la tierra y de los bienes comunes. El resultado ha sido el abandono de campos y por ende también de bosques. El consumo masivo de las sociedades desde el uso excesivo del papel y madera sin búsqueda de alternativas, como en otro siglo lo fue el uso el lino o el cáñamo.
Desde organizaciones no gubernamentales cada año emiten comunicados alertando a las personas el estado de los pulmones de la tierra. Avanzar hacia sociedades con economías sostenibles implica pensar y desarrollar un plan estratégico del cuidado de los bosques, porque a partir de ellos se genera la biodiversidad del planeta, el equilibrio con humedales y la protección a las comunidades ante situaciones climáticas adversas.