Hay muchos hoteles en todo el mundo que fueron frecuentados por la familia real, pero alojarse en una casa o finca real que ha sido visitada por la monarquía es una experiencia única. Si deseas sentirte como la realeza, estas propiedades en el Reino Unido, aprobadas por la monarquía pasada y presente, son lugares ideales para tu próximo viaje. ¡Cualquier plebeyo puede reservarlas a través de Big House Experiences!
1. Windrush Hyde Estate en Cotswolds, Inglaterra
La finca Windrush Hyde, en los Cotswolds (Inglaterra), fue visitada por primera vez por el rey Carlos III, quien elogió sus muros de piedra. Diseñada por la galardonada paisajista Jinny Blom, la finca cuenta con una piscina y un cine de última generación.
2. Mereview Manor en Lake District, Inglaterra
También visitado por el rey Carlos III, Mereview Manor en el Lake District, Inglaterra, ofrece vistas panorámicas del lago Windermere y servicios al aire libre, como cenas en un horno de pizza personalizado. Este escenario inspiró a Beatrix Potter.
3. Mansión High Peak en Derbyshire, Inglaterra
El príncipe Alberto de Sajonia-Coburgo y Gotha, esposo de la reina Victoria, visitó esta mansión cuando era propiedad del ingeniero James Watts. La propiedad está llena de historia y todavía conserva sus tradiciones, incluido un gran salón medieval para banquetes.
4. El Priorato en Suffolk, Inglaterra
El Priorato, ubicado en la costa de Suffolk, ha sido apreciado por la realeza desde el siglo XIII, cuando Enrique III lo visitó. La propiedad se convirtió en un destino favorito para la caza de la realeza y la nobleza, y María Tudor se alojó allí después de su boda con Carlos Brandon, duque de Suffolk, en 1527.
5. Castillo de Wyatt en Dorset, Inglaterra
El castillo de Wyatt, en Dorset, fue inaugurado por la princesa Isabel en 1800 y ha sido visitado por varios miembros de la familia real. Fue un lugar favorito del rey Jorge III y la reina Carlota de Mecklemburgo-Strelitz, quienes celebraron su aniversario de bodas con familiares y amigos en la finca. La propiedad cuenta con nueve dormitorios y una mesa de comedor con capacidad para veinte comensales, además de la opción de cenar con un chef privado.