Roma, conocida por sus ruinas a cielo abierto, ofrece mucho más que historia antigua. La capital italiana cuenta con una variedad de parques y miradores ideales para disfrutar del horizonte y explorar su rica diversidad natural y arquitectónica.
El Mirador del Janículo
Aunque no es una de las siete colinas legendarias sobre las que se construyó Roma, el Janículo (Gianicolo) es un mirador imperdible. Ubicado al oeste del Tíber, entre el Trastevere y el Vaticano, este paseo ofrece vistas espectaculares de la ciudad, especialmente al atardecer. Es un lugar popular para hacer picnic y disfrutar de snacks de vendedores ambulantes.
El Janículo es también un sitio histórico, transformado en un paseo público en memoria de los acontecimientos heroicos de los luchadores por la República Romana en 1849. Aquí se encuentra la estatua ecuestre de Giuseppe Garibaldi y bustos de los ilustres garibaldinos. Además, la Fontana dell’Acqua Paola, encargada por el Papa Paolo V y realizada por Giovanni Fontana y Flaminio Ponzio, ofrece una vista panorámica impresionante.
San Pedro a Través de una Cerradura
La colina Aventino ofrece una de las vistas más fascinantes de Roma. En el Jardín de los Naranjos, desde la cerradura de la puerta de la Villa Magistral, sede de la Soberana Orden de Malta, se puede ver la cúpula de la Basílica de San Pedro enmarcada por un seto de laurel. Este efecto “telescopio” crea la ilusión de que la cúpula está más cerca y es más grande.
Cerca de este lugar, se encuentra el Rosedal de Roma, con más de mil especies de rosas de todo el mundo. Con entrada gratuita, el Rosedal está ubicado sobre un antiguo cementerio judío, con caminos que forman la Menorá.
El Jardín de los Naranjos
El Jardín de los Naranjos, o Parco Savello, es una terraza sobre la ciudad rodeada de pinos y árboles de naranja. Este lugar ofrece vistas espectaculares y es considerado uno de los lugares más románticos de Roma. Su nombre oficial deriva de los árboles presentes, y su estructura actual se estableció en los años 30.
Villa Pamphili
En el barrio del Trastevere, Villa Pamphili es una extensa villa con una rica combinación de jardines, paisajes naturales y arquitectura histórica. El Casino del Bel Respiro, también conocido como el Palacio Pamphili, es una obra maestra de la arquitectura barroca. Los jardines de la villa son un excelente ejemplo del estilo italiano, con avenidas arboladas, fuentes ornamentales y estatuas clásicas. Villa Pamphili es ideal para paseos tranquilos, picnics, y actividades deportivas, y también es perfecta para recorrer en bicicleta.
Villa Borghese
Ubicado en la colina del Pinicio, Villa Borghese es el mayor espacio verde de Roma y ofrece una variedad de atracciones. La Galería Borghese, ubicada en uno de los laterales del parque, alberga obras de Caravaggio, Rafael, Tiziano, Correggio y Bernini. El parque también cuenta con el Bioparco, un zoológico, y el Silvano Toti Globe Theatre, una réplica del famoso Shakespeare’s Globe Theatre de Londres. Además, el Reloj de Agua de Pincio, una pieza de ingeniería del siglo XIX, aún funciona y es una atracción popular.