Según un informe del Eurobarómetro, el 75% de los españoles ha cambiado sus prácticas en el hogar en los últimos cinco años con el objetivo de reducir su consumo energético. Este porcentaje está ligeramente por debajo de la media de la Unión Europea, que se sitúa en un 77%.
Cambios en el transporte y en el trabajo
Además de los ajustes en el hogar, más de la mitad de los encuestados (56%) ha modificado sus medios de transporte para ser más eficientes energéticamente. Asimismo, el 40% ha adaptado sus patrones de consumo energético en su lugar de trabajo, lo que refleja una conciencia creciente sobre la importancia de reducir el uso de energía en diferentes ámbitos de la vida cotidiana.
Medidas concretas adoptadas
Las acciones específicas tomadas por los españoles incluyen el aislamiento de techos, paredes y ventanas, con un 24% optando por esta solución. El 17% ha decidido cambiar su caldera, mientras que un 15% ha instalado paneles solares. Sin embargo, hay quienes aún no han tomado medidas; entre ellos, el 39% argumenta que no lo hace por razones económicas. Un 26% menciona la falta de tiempo y un 20% señala que la decisión depende del propietario de la vivienda o del edificio.
Demandas a la Unión Europea
En cuanto a las expectativas sobre el papel de la Unión Europea, un 48% de los encuestados considera que es necesario implementar acciones más coordinadas a nivel europeo para enfrentar los desafíos energéticos. Entre las propuestas, el 32% sugiere ayudar a los consumidores a acceder a precios de energía más asequibles, el 31% aboga por invertir en tecnologías energéticas innovadoras, y el 27% pide reducir el consumo de energía en el continente.
Además, un 59% de los españoles cree que la UE debería motivar a los Estados miembros a apoyar a los hogares en situación de pobreza energética. Un 53% pide medidas para reducir el consumo energético en general y un 44% reclama facilitar la producción y consumo de energías renovables por parte de los ciudadanos.
Con estos datos, queda claro que los españoles son cada vez más conscientes de la importancia de la eficiencia energética y esperan acciones concretas tanto a nivel personal como institucional.