Dejar tu computadora en suspensión es como dejarla en un estado de limbo entre estar encendida y apagada. Es como dormir con un ojo abierto. Puedes hacerlo usando la opción dedicada o simplemente bajando la tapa en las notebooks. Esto detiene muchos procesos, pero no todos.
Ventajas de suspender tu computadora:
- Encendido rápido: Cuando reactivas, el encendido es rápido.
- Continuidad: Todo lo que dejaste abierto antes permanece igual, como los programas en la barra de tareas o las pestañas del navegador.
- Ahorro de tiempo: No necesitas abrir todo de nuevo al volver a trabajar.
Sin embargo, suspender la computadora durante largos periodos puede no ser la mejor idea. A nivel técnico, algunos procesos continúan funcionando, lo que puede causar desgaste y afectar el rendimiento cuando la vuelvas a encender. Además, la falta de actualizaciones de seguridad durante la suspensión puede dejar tu dispositivo vulnerable a ataques.
¿Cuándo es mejor apagar tu computadora?
Es recomendable apagarla cuando no la uses por muchas horas o periodos largos. Esto detiene por completo el desgaste de los componentes, como un sueño reparador para tu dispositivo.
Desventajas de apagar la computadora:
- Reinicio completo: Al reiniciar, tendrás que abrir todo de nuevo, lo que puede llevar tiempo.
- Impacto ambiental: Aunque pequeño, apagar la computadora puede ayudar a ahorrar energía.
Aunque en suspensión el consumo de energía es bajo, puede agotar la batería en dispositivos portátiles si no están conectados a la corriente durante mucho tiempo.
¿Apagar o suspender?
La regla general es apagar si no usarás la computadora por varias horas y suspender si los descansos son breves entre sesiones. También existe una tercera opción: la hibernación, que guarda la información pero apaga la memoria RAM.
Recuerda que reiniciar de vez en cuando es una buena práctica para resolver problemas y mantener tu dispositivo funcionando correctamente. Esto se aplica no solo a las computadoras, sino también a los celulares y tablets.
