La Unión Europea Aprueba Acuerdo Comercial Interino con Chile

Los gobiernos de la Unión Europea (UE) dieron un paso crucial este lunes al respaldar el acuerdo comercial interino con Chile. Este acuerdo, que contiene disposiciones para la liberalización del comercio y las inversiones, será provisional hasta que se complete la ratificación del acuerdo marco de asociación, de mayor alcance.

Avances en la Relación UE-Chile

El Consejo de la UE respaldó el acuerdo interino, que entrará en vigor tan pronto como Chile complete su proceso de ratificación interna. Firmado en diciembre pasado, este pacto busca crear nuevas oportunidades económicas y promover valores compartidos entre ambas partes.

Detalles del Acuerdo

El acuerdo incluye disposiciones específicas sobre derechos humanos, comercio sostenible e igualdad de género, siendo este último un hito al ser la primera vez que la UE incorpora este aspecto en un acuerdo comercial con un país tercero.

En cuanto a las exportaciones de la UE, alrededor del 99,9% quedarán libres de aranceles, excepto el azúcar. Se espera un aumento significativo en las ventas de la UE, superando los 4.500 millones de euros.

Impacto en la Agricultura y Sostenibilidad

Productos agrícolas sensibles, como la carne, ciertas frutas y verduras, y el aceite de oliva, estarán exentos de la plena liberalización. Además, se espera que las inversiones del programa europeo Global Gateway impulsen cadenas de suministro más sostenibles en sectores como el litio, el cobre y la producción de hidrógeno verde en Chile.

Siguiente Paso y Contexto Histórico

El acuerdo interino permitirá la entrada en vigor rápida de normas comerciales modernizadas y se aplicará hasta que el acuerdo marco avanzado esté completamente en vigor. Este último entrará en vigor provisionalmente en algunas partes, a la espera de la ratificación de todos los Estados miembros de la UE, mientras que el acuerdo comercial interino entrará en vigor cuando concluya el proceso de ratificación en el Congreso de Chile.

Este acuerdo refleja la continuación de las sólidas relaciones entre la UE y Chile, que se remontan al acuerdo de asociación de 2002, que incluye un tratado de libre comercio.

El crecimiento del comercio bilateral entre la UE y Chile ha sido notable desde la entrada en vigor de este acuerdo, lo que demuestra el impacto positivo de una asociación económica sólida.