El campo argentino se encamina hacia una de sus mayores cosechas históricas

La campaña agrícola 2024/25 promete ser histórica en términos de producción y exportaciones, aunque enfrenta retos climáticos, económicos y políticos que ponen a prueba al sector.

Una cosecha casi récord

Según la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR), la producción total de granos podría alcanzar los 140,9 millones de toneladas, un 7% más que el ciclo anterior y apenas por debajo del récord histórico de 141,5 millones logrado en 2018/19. Gustavo López, de la consultora Agritrend, ajusta la proyección a 138,5 millones de toneladas, pero coincide en que será la segunda mayor cosecha de la historia.

Exportaciones en alza, pero lejos del pico histórico

Los ingresos por exportaciones se estiman en US$33.600 millones, un incremento de US$1500 millones respecto al ciclo actual. Sin embargo, la cifra está lejos del récord de 2021/22, cuando se alcanzaron US$41.800 millones gracias a precios internacionales excepcionales.

Clima y precios: dos factores clave

El éxito de la campaña dependerá en gran medida de las lluvias en los meses de verano, especialmente en enero y febrero. La falta de agua podría comprometer los rendimientos. Además, los precios internacionales han caído: la soja se paga un 15% menos y el maíz un 7% menos que el año anterior, lo que limita la rentabilidad de los productores.

Costos altos y políticas públicas

Los costos elevados de insumos y los derechos de exportación vigentes afectan al sector. Aunque el gobierno eliminó retenciones en algunos sectores, como leche y carne porcina, los cultivos clave como soja, maíz y trigo siguen gravados. Estas medidas, según los especialistas, frenan el crecimiento del agro argentino.

Rentabilidad desigual entre regiones y cultivos

Los márgenes brutos cayeron un 26% respecto al ciclo anterior, golpeando especialmente a quienes alquilan tierras. En el sur de Buenos Aires, cultivar soja genera pérdidas de hasta 28 dólares por hectárea, mientras que el girasol resulta más rentable, con ganancias de 241 dólares por hectárea. Estas diferencias reflejan no solo las condiciones locales, sino también las dinámicas de precios internacionales.

Perspectivas: ¿un futuro prometedor o incierto?

La campaña agrícola 2024/25 tiene el potencial de consolidarse como una de las mejores de la historia, siempre y cuando las lluvias sean favorables durante el verano. A largo plazo, el agro argentino necesita no solo mejoras fiscales, como la eliminación de retenciones, sino también una mayor inversión para sortear los desafíos climáticos y económicos.

El sector enfrenta un panorama mixto: grandes oportunidades, pero también retos significativos que exigen respuestas rápidas y efectivas para aprovechar al máximo su potencial.